¿El arnés realmente daña tu cabello?

Muchos dueños de perros, cuando consideran comprar un arnés, se preguntan si dañará el pelaje, especialmente en perros de pelo largo.

A menudo es necesario el uso de un cinturón de seguridad. En razas pequeñas como el Yorkshire Terrier, Lhasa Apso y Shih Tzu, usar un collar puede causar problemas con la laringe sensible (especialmente cuando es cachorro). Es vulnerable a lesiones por el tirón repentino de la correa (son fáciles de atrapar, especialmente cuando se usa una correa retráctil) y cuando el perro está tirando.

El collar destruye más

El arnés también tiene la ventaja de ser más estable que el cuello, que tiende a enroscarse alrededor del cuello y arruinar así la prenda. Los collares de metal (como las cadenas) también pueden manchar el pelaje, especialmente en perros de color claro.

Los propietarios se ponen el arnés solo para dar un paseo y se lo quitan inmediatamente después de regresar a casa. Esto evita que el pelaje se enrede y se vuelva quebradizo, lo que suele ocurrir si deja el collar alrededor del cuello de su perro todo el día.

Cómo elegir un arnés

Al elegir los tirantes, evite los tirantes hechos con tiras anchas y cintas forradas de fieltro. La piel debajo de este material es susceptible a daños y fieltro. Un arnés hecho de cuero enrollado o enrollado funciona mejor, especialmente para razas de pelo largo.

También debes asegurarte de que las rayas no corran en áreas que son particularmente propensas a enredarse y donde el cabello es más grueso, es decir, debajo de las axilas. Es imperativo conseguir el tamaño correcto.

Los tirantes demasiado sueltos se moverán por el cuerpo, limpiando el pelo, demasiado apretado, lo romperán y traerán a nuestra mascota malestar físico y mental. Sin embargo, un collar bien ajustado es a menudo una mejor opción que un collar, incluso para razas en las que la lana es la decoración principal.