¿El movimiento del microchip debajo de la piel podría ser peligroso para mi perro?

El microchip mide aproximadamente 14 mm de largo y 2 mm de ancho, cubierto con un vidrio biológico especial y una sustancia especial que se usa, por ejemplo, en implantes humanos, como un marcapasos.

Esto asegura que el cuerpo del perro no reconozca el microprocesador como un cuerpo extraño y que el proceso de inflamación no surja ni se suprima.

El chip se implanta en el lado izquierdo del cuello a la mitad de la longitud. Sin embargo, sucede que se mueve en el tejido subcutáneo. No afecta negativamente a la salud y estado del animal. Debido a la posibilidad de migración del microchip debajo de la piel, al identificar a un perro con un lector, primero debe escanear el área del cuello y, si no hay lectura, incluso toda la superficie del cuerpo.