El problema de mantener al perro en el corral

Problema con mantener al perro en el corral.
Oye,
Tengo un problema con encerrar a la perra en el aviario porque cuando cierro la puerta, salta agresivamente hacia mí y ladra, me rascan la mano una vez y desde entonces no puedo evitar cerrarla. Recientemente, le doy comida en un tazón en la arena y utilizo el momento en que come para cerrar la puerta con calma. El perro me hace esto a mí y a mi padre, nos acepta y no es agresivo en otras circunstancias, pero cuando mi esposo, que lo cuida la mayor parte del tiempo, lo encierra, no tiene absolutamente tal comportamiento, es tan obediente para él como un cordero. No quiero enseñarle a comer cerrándolo, porque hay veces que necesito cerrarlo rápido o por un momento, porque acaba de llegar alguien y no habrá tiempo para «jugar» con la comida. La arena es grande y no le resulta difícil entrar cuando se le ordena, pero el problema surge cuando se cierra la puerta.
Saludos cordiales y gracias de antemano por su respuesta.
Paulina

Los pastores holandeses son perros sensibles y orientados a los humanos. No es sorprendente que un perro joven y enérgico, creado para comunicarse con la gente, reaccione mal cuando está encerrado en un corral; pasar tiempo solo no está en su naturaleza y es contrario a sus necesidades.

La clave de la respuesta tranquila del perro al cerrar la caja es, sobre todo, la constancia y actitud para aprender a comportarse con calma al cerrar, así como aprender un nuevo truco por el que el perro será recompensado.

Como ya habrás notado, al llegar a la arena, la atención del cuadrúpedo puede distraerse con la comida: el mestizo ocupado por el cuenco no reaccionará agresivamente y se cerrará fácilmente. Este comportamiento del perro se puede utilizar para aprender a aceptar el cierre de la puerta. Habiendo entrado en la caja, basta con dejar que el perro mastique la comida o arroje una pequeña golosina en la esquina de la jaula. Gracias a esto, la entrada al parque estará bien asociada con el perro, y cerrar al perro mientras come ya no es un problema.

Con el tiempo, el tiempo de recompensa del perro puede cambiar y la golosina se proporciona como recompensa por esperar tranquilamente a que se cierre la puerta. Es mejor realizar este cambio cuando el comportamiento del perro claramente significa que la mascota ya ha aprendido cómo recibir la recompensa después de entrar en la jaula. Luego, con una mano, pasamos el mordedor / barniz del perro por la rejilla, y con la otra, simultáneamente cerramos la puerta. Poco a poco vamos introduciendo un retraso en la entrega del premio para que el perro aprenda a esperarlo pacientemente.

La mayoría de los perros aprenden muy rápidamente que deben estar encerrados en un corralito. Sin embargo, el adiestramiento debe ser constante: durante el adiestramiento, el perro debe recibir una golosina cada vez. Incluso un solo olvido o la falta de tiempo para encontrar el mordedor pueden causar frustración en el perro y una recurrencia de la falta de voluntad para cerrar.