¿Puede un rábano específico saber en el plato de una mascota? ¡Compruebe si el rábano es seguro para su perro!
El rábano ligeramente picante es una gran adición a sándwiches y ensaladas. ¡También puede ser un bocadillo saludable entre horas! Pero, ¿está seguro de que no hay sustancias nocivas para el perro en su composición? ¡Vamos a revisar!
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¿Qué contiene un rábano?
El rábano, que aparece en tiendas y bazares en primavera, es una planta con raíces rosadas engrosadas comestibles. Contiene solo 16 kcal / 100 gy es rico en vitamina C, ácido fólico y vitamina B. Esta verdura también es una buena fuente de potasio y fibra. Contiene beneficios para la salud que reducen el riesgo de varios tipos de cáncer, apoyan la función hepática y tienen propiedades bactericidas. Los rábanos deben incluirse en la dieta de las personas con indigestión, flatulencia, trastornos alimentarios y diabetes. Sin embargo, debido a su alto contenido en glucósidos y ácidos orgánicos, esta verdura no debe incluirse en la dieta habitual de personas con úlceras de estómago, inflamación recurrente del tracto digestivo y enfermedad renal grave. ¿Son los rábanos realmente seguros para los perros?
¿Puede un perro comerse un rábano?
El rábano es una verdura que a veces se puede servir a un perro, si, por supuesto, al animal le gusta su sabor específico. Los rábanos crujientes bajos en calorías pueden ser una alternativa interesante a las golosinas grasosas en una caminata o una recompensa durante un entrenamiento. Sin embargo, hay que recordar que los rábanos no deben administrarse a perros que padecen enfermedades graves que requieran una nutrición especializada. Además, una dosis demasiado alta de fibra en los vegetales puede causar malestar digestivo, y los ácidos de este vegetal pueden irritar el sistema digestivo de las mascotas y causar flatulencias en perros más sensibles. Por tanto, si queremos incluir sistemáticamente verduras en la dieta de un perro (por ejemplo, como complemento de la dieta casera o BARF), debemos elegir plantas con un sabor más suave, por ejemplo, calabacín, perejil, remolacha o zanahoria.