Un perro en un automóvil: ¿qué no se debe permitir con una mascota mientras se viaja?

Viajar con tu perro es divertido, ¡pero también arriesgado! ¿Qué es lo que nunca puede hacer un perrito en un coche? ¿Qué buscar al transportar un perro en coche?

Cuando vaya de viaje con un perro o incluso a un paseo corto, debe tener mucho cuidado. No mantener segura a su mascota mientras viaja no solo es una amenaza para su mascota, sino que también puede causar accidentes. ¿Qué reglas se deben seguir y cómo mantener seguro al perro en el automóvil?

¡Un perro en un automóvil es una causa común de accidentes!

La investigación realizada por científicos muestra claramente que el transporte inadecuado de una mascota puede causar accidentes. El animal, moviéndose libremente alrededor del vehículo, distrae al conductor del movimiento. Por otro lado, un perro (incluso el más pequeño) que se sube inesperadamente al regazo del conductor o salta al asiento puede crear una confusión extrema en el automóvil y provocar un desastre. El perro en sí, si no está bien sujeto, puede resultar gravemente herido en un accidente. Los riesgos se pueden evitar fácilmente siguiendo algunas reglas simples.

1. Nunca lleve a su perro en el asiento delantero.

Colocar al perro en el asiento delantero es un gran riesgo para él. En caso de accidente, no solo puede caerse del parabrisas del automóvil. Además, ¡un airbag desplegado puede dañar gravemente a su mascota!

2. No mantenga al perro en su regazo mientras conduce.

Por lo tanto, un perro transportado en un automóvil no solo distrae al conductor. Una mascota que se retuerce en el regazo del conductor podría pasar accidentalmente debajo del volante y provocar un accidente. Con un frenado más brusco, el de cuatro patas puede deslizarse de las rodillas al piso y pisar el pedal sin querer o hacer que la dirección sea completamente imposible.

3. Asegúrese de mantener a su perro a salvo mientras viaja.

Un perro en un coche no es solo una distracción. En caso de accidente, un ATV no asegurado puede resultar gravemente herido. También existe el riesgo de que, en caso de accidente, el animal asustado salte del automóvil a una calle muy transitada y corra hacia adelante a ciegas.

4. No permita que el perro saque la cabeza por la ventana.

Una persona de cuatro patas que asoma la cabeza por una ventana puede lesionarse los ojos con arena, lo que incluso puede provocar ceguera. Una mascota que se transporta con una ventana abierta también puede saltar por la ventana mientras conduce. Especialmente si nota algo interesante al otro lado de la calle. Si no lo inmoviliza, puede saltar a la carretera y sufrir un accidente grave. Por otro lado, sujeto a un arnés o collar con una correa, ¡puede colgarse de una ventana o ser arrastrado detrás de un automóvil!

5. No deje a su perro desatendido en el coche.

Dependiendo de la naturaleza de la mascota, su sensación de seguridad en el automóvil y la época actual del año, algunos dueños de mascotas pueden tener la tentación de dejar a su mascota sola en el automóvil. Sin embargo, incluso durante los meses más fríos, dejar a su mascota en el automóvil sin vigilancia, aunque sea por un tiempo, es un grave peligro para la salud. Un perro abandonado en una lata no solo puede sufrir un golpe de calor. También puede destruir el interior y asfixiarse con algún elemento pequeño.