Vacaciones – en ayuda de los comedores de perros

La Navidad es un momento especial. No solo el ambiente, las reuniones o regalos tan esperados, sino también la cantidad de comida consumida. ¿Cómo pasar este tiempo con tu perro gourmet?

Aquí hay cuatro consejos para los ávidos criadores de perros. ¡Pueden ser útiles especialmente ahora!

1. Esfuerzo apropiado

Antes de Navidad, es difícil encontrar tiempo para dar un buen paseo. Por otro lado, la alta actividad física aumenta el apetito. ¿Cómo encontrar un término medio? Por suerte para nosotros y para nuestros perros, el esfuerzo mental es tan agotador como el físico. Quizás incluso más.

Cualquier acción que requiera el uso del cerebro del perro vendrá al rescate. Huele, escucha órdenes, activamente (no «para ojos bonitos») consigue comida, resuelve acertijos o soporta cortésmente varios tratamientos de belleza.

2. Aparatos útiles.

Un cong relleno de pasta, una alfombra olfativa con golosinas escondidas, un cuenco a cámara lenta, cuernos o pezuñas para masticar, o comida normal empacada en cajas cada vez más grandes pegadas con cinta adhesiva.

Todo está creado para no solo cansar al perro, sino también saturarlo, por lo que cada idea merece atención. Especialmente cuando queremos centrarnos en cocinar o en una comida festiva.

3. Nochebuena

La familia rara vez aprueba la prohibición de alimentar al perro. Especialmente la generación más joven. Siempre habrá alguien que se apiade de un perro pobre, exhausto y demacrado. En primer lugar están los buenos abuelos, las buenas abuelas. Porque si el perro no hubiera tenido hambre, no se habría parado a mirar …

Considere las aspiraciones de sus invitados. Si estamos seguros de que el perro será alimentado, es mejor reducir su dosis matutina o omitirla por completo. El comedero estará encantado, el perro estará aún más encantado y no desperdiciaremos nuestros nervios en atención.

4. Comandos útiles

Una jaula o una guarida serán una ayuda invaluable durante las vacaciones. Es cierto que no impedirán que el perro mire con nostalgia los platos, pero sí dificultarán que la familia alimente al perro de forma descontrolada. También existe la posibilidad de que el perro se canse de esperar y se duerma, pase lo que pase en la mesa. Los comandos para «poner», «jaque mate» o «jaula» deben ser claros para el perro, y el comando debe ejecutarse sin demora.

¿Tiene formas comprobadas de lidiar con perros codiciosos?